El avance tecnológico y las tecnologías para la salud y el bienestar empiezan a solventar problemas de la salud que parecía imposibles de mitigar sus consecuencias, como es el caso de combatir los ronquidos.
Cada día se recurre a la tecnología para mejorar los servicios de salud y bienestar para las personas, bien sea por medio de administraciones públicas o privadas, con el objetivo de alcanzar una mayor calidad de vida relacionada con la salud.
Las tecnologías de la salud conforman un campo muy amplio puesto que abarcan cualquier tecnología utilizada para promover la salud. Previenen, diagnostican y tratan las enfermedades mediante la rehabilitación, motorizan el estado físico de las personas y utilizan todo tipo de maquinaria tecnológica que colabore en la recuperación de la salud de las personas.
El avance y desarrollo de esta tecnología para mejorar la salud de las personas, y abogando por la sostenibilidad, es uno de los mayores retos al que se ha enfrentado la sociedad actual.
Por ello, durante esta última década se ha producido un aumento significativo en la demanda de tecnologías para la salud que exigen profesionales altamente cualificados en el ámbito multidisciplinar de la investigación e innovación.
Transformación digital
Los profesionales sanitarios, o relacionados con este campo, necesitan adquirir nuevas competencias que los profesionalice en habilidades tecnológicas e innovación para poder adaptarse al nuevo panorama que presenta la sociedad actual.
Un profesional de la salud que integre su conocimiento académico y su experiencia laboral a su nueva formación en investigación e innovación tecnológica de la salud será un profesional competente y muy demandado. Ser capaz de trabajar junto a un equipo de profesionales ingenieros tecnológicos de la salud y ser capaz de crear un sistema inteligente antirronquidos parece un sueño imposible.
Sin embargo, día a día, se ha comprobado que gracias a la investigación de estos profesionales de la salud se encuentra solución a todo, incluso una cama antirronquidos.
Formación previa
El perfil recomendado para realizar estudios en innovación, emprendimiento y tecnologías para la salud es el de una persona graduada o licenciada universitaria vinculada al área de la ingeniería y de la salud.
Por ejemplo, sería idóneo y recomendado partir de titulaciones como:
- Grado en Ingeniería Biomédica y la rama de la salud.
- Grado en Ingenierías de la Rama Industrial: Mecánica, Química, Eléctrica, Electrónica y Automática o de Tecnologías Industriales.
- Grado en Ingenierías de Tecnologías de Información y Comunicaciones: Ingeniería Informática e Ingeniería de Tecnologías y Servicios de Telecomunicación.
La especialización
Ser capaz de desarrollar un sistema antirronquidos y dar con la solución a millones de personas que día a día sufren las consecuencias de este tipo de patología, como lo es roncar, es la misión de cualquier profesional de salud que busca la calidad y bienestar de la vida de cualquier persona.
Si estás interesado en formarte de manera más profunda en el campo de la investigación, innovación y tecnología de la salud no dudes en visitar las ofertas de cada cursos, másteres o doctorados que oferten las universidades.
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